Fotos impresas deben estar secas y almacenadas debidamente después de imprimirse o los colores pueden no coordinar con los colores en la foto original. 

•  No apile las fotos una encima de otra inmediatamente después de haberlas impreso.
   
• Fotos impresas deben de estar secas naturalmente por aproximadamente 24 horas, evitando altas temperaturas, humedad y viento. Se tomará aproximadamente 24 horas para el tono del color a estar totalmente estabilizado después de la impresión. Por ende, el tono del color inmediatamente después de la impresión puede variar un poco después de estar totalmente seco. Areas negras pueden aparecer verdosas poco después de la impresión, no obstante, el color negro se estabilizará en 24 horas y aparecerá negro al secarse completamente.
   
• Para prevenir que las fotos pierdan el color, guardelas en un album de fotos, carpeta transparente o marco de foto que no espongan el lado impreso de la foto al aire.
   
• Guarde el album de fotos, carpeta transparente o marco de foto, en el interior y alejado de altas temperaturas, humedad y luz directa del sol.